jueves, 29 de abril de 2010

imposible la imagen, Roxana Palacios

sin embargo pájaros cantan esta noche
el resto son hojas que oscurecen la ventana
las paredes
el cielo frío como un rechazo
yo bailo en mi cuerpo un fragmento de esplendor
afuera la calle
su rigidez de cosa extraña
no tengo explicación para la carne
ninguna verdad
hay luces por fuera de la casa
no me entrego a sus brazos
soy el pensamiento helado de esta noche

Sin embargo pájaros cantan esta noche, en Saquemos a mamá del cielo, Roxana Palacios 2010

martes, 27 de abril de 2010

Lector: no Clasifiques: ¡fantasías!, con desvío, Macedonio Fernández

La presente publicación se inspira principalmente en el deseo de dejar argumentada una protesta, que ha tardado mucho en formularse, contra el noumenismo. Asombra que los pensadores, más aun los artistas, y sobre todo los hombres de Pasión -única justificación y fin de la vida y el arte y única condición en que hay una felicidad posible- no se hayan unido en protesta y para trabajar en la liberación del pensamiento humano de las impuras sombras que Kant le insufló, usando un poder intelectual privilegiado en negar la substancialidad del vivir y la adecuación de la inteligencia al ser, la Cognoscibilidad. El noúmeno y el agnosticismo son las peores obras de la inteligencia, y si la Pasión no se hizo renuncainte al contacto de estas dos tristezas, es porque ella es la certeza misma y el ser mismo. Pero hay algo en el día humano actual, en el Día posterior a Kant, que hace imperfecto el unísono de deslumbramiento con que el Día debe enloquecer a la Pasión.
Goethe debió acudir en socorro de la Belleza al sentir la repulsión que no puedo dudar experimentara ante los nutridos capítulos de este hurtador nuestro.
Creador de Margarita, de Mignon, ¿cómo pudo callar? Pasión, ¡Idoneidad suprema del Ser!
Lector: no Clasifiques: ¡fantasías!, con desvío.
Cotidiana tuya, como mía, es Fantasía.

No toda es vigilia la de los ojos abiertos, 1928, (fragmento), Macedonio Fernández
Foto: Susana Thénon

seminario: experiencia del análisis, experiencia del zen, por Alberto Silva

cuando Japón, y dentro de él el Zen, dicen "Occidente" pueden estar pensando en una o varias de estas tres cosas: la Modernidad, el Cristianismo y el Psiconálisis.

Alberto Silva Castro


Un fenómeno cautiva (y estremece) al pensamiento contemporáneo: la fábrica racionalista amenaza derrumbe. Se agrieta la razón entendida como ego cartesiano. Cunden sospechas ante cualquier verdad que sólo sepa acreditarse con argumentos a priori. En respuesta a sus dudas, el hombre que quiere conocer busca un discurso diferente, capaz de encontrar apoyo en la experiencia. ¿Experiencia? Una que surge del encuentro entre el aclaramiento de la mente (skolé) y prácticas de vida (háiresis). Una que, al adentrarse en el enigma de la existencia, lucha por transformarla.

Interesa el cotejo de dos eminentes antropologías de la experiencia:
* Al Este, cierto zen, el de Dôgen Zenji (siglo XIII).
* Al Oeste, cierto psicoanálisis, el de Jacques Lacan (siglo XX).
De Lacan hablamos sin descanso. En cambio, ¿qué sabemos del zen?: ¿es religión, es filosofía, es yoga, es plegaria, es terapia? Una clarificación resulta urgente para entender hasta qué punto Dôgen y Lacan han de medirse en el poco balizado terreno de la experiencia.

Porque ambos muestran ser maestros de experiencia:
* Tenaces para ensayar sobre sí mismos nuevas prácticas de existencia.
* Hábiles para transmitirlas metódicamente volviéndolas comunes, humanas. Por así decirlo, universales.

Tender puentes entre ellos equivale a observar cómo abordan dimensiones cruciales de la existencia:
* Lo real, la ilusión (ambos atrapados en la redada del lenguaje).
* El placer y el dolor (ambos sujetos al ansia/deseo).
* La mente y el vacío (ambos anhelando un más allá de lo pensado).

Ahora bien, ¿estamos prontos para ser interpelados por la experiencia? ¿Estamos de acuerdo en afirmar que no hay conocimiento sin una íntima conexión entre los datos de la mente y el pulso del corazón? Este ciclo indaga en la cuestión.

Días y horario de los encuentros: martes a las 18,30
Lugar de encuentro: Colombres 420, Lomas de Zamora
Informes e inscripciones: macedonianos@gmail.com
Teléfono de consultas: 156-782-4551


* Foto: Alberto Silva Castro, Zen stones

sábado, 24 de abril de 2010

VII Concurso Nacional Macedonio Fernández

La Fundación Médica de Lomas de Zamora y el Taller Macedonio Fernández de lectura y escritura creativa, invitan a la presentación de los libros:

Pasto del Fuego, de Gustavo Fontán
La hija del carnicero, de Analía Mehlberg
Fast Food, de Carolina Bruck
Sabactani, de Gustavo Weisberger
Cuerdas rotas, de Alejandro Tloupakis
Strip, de Marión Berguenfeld


ganadores de las tres últimas entregas del Concurso Nacional Macedonio Fernández de narrativa breve y poesía, en la 36a Feria Nacional del Libro de Buenos Aires, Sala Roberto Arlt, el viernes 23 de abril de 2010, a las 15

Hablarán de las obras los escritores: María del Carmen Colombo, Inés Garland, María Isabel Pazos, Javier Adúriz y Roberto Ferro Coordinación general: Roxana Palacios

Habrá un brindis después de la presentación, los esperamos!
*

miércoles, 21 de abril de 2010

abrir el ojal de una herida llamada ojo, María del Carmen Colombo

Miserable estratagema
para tenerte parecerme
a vos

ser en espejada lejanía
lo que brilla por ausencia
una estrella

no me llames ilusa
estoy arriba
reina de la nada
ardiendo en mis heridas

soy tu pequeño espejismo
qué peor atadura
ah, si quisieras llegar hasta aquí
y entraras en esta luz

en todo caso si así fuera, querido mío
la luz hiere, la luz es realidad


"Carta a papá", Bestiario sentimental, María del Carmen Colombo

sábado, 17 de abril de 2010

yo no supe dónde entraba, San Juan de la Cruz

Entreme donde no supe
y quedéme no sabiendo
toda ciencia trascendiendo.

Yo no supe dónde entraba
pero cuando allí me vi
sin saber dónde me estaba
grandes cosas entendí
no diré lo que sentí
que me quedé no sabiendo
toda ciencia trascendiendo.

...........................

El que allí llega de vero
de sí mismo desfallece
cuanto sabía primero
mucho bajo le parece
y su ciencia tanto crece
que se queda no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.

Cuanto más alto se sube
tanto menos se entendía
que es la tenebrosa nube
que a la noche esclarecía
por eso quien la sabía
queda siempre no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.

...........................

Este saber no sabiendo
es de tan alto poder
que los sabios arguyendo
jamás le pueden vencer
que no llega su saber
a no entender entendiendo
toda ciencia trascendiendo.

Y si lo queréis oír
consiste esta suma ciencia
en un subido sentir
de la divinal esencia
es obra de su clemencia
hacer quedar no entendiendo
toda ciencia trascendiendo.

San Juan de la Cruz (1542-1591) Coplas (fragmento)

miércoles, 14 de abril de 2010

él escapó, Adolfo Zutel

se diría que los dedos miraban lo profundo no miraban
pero él no está
alguna tibia un fémur un agujero del cráneo compañero de todos los agujeros del cráneo en aquel hueco del suelo

(un zorzal empecina el gorjeo)

se diría que él no está en el lugar exacto donde la camioneta do dejó y aunque trataron de cubrirlo con mil capas de arcilla
él escapó él escapó él escapó él escapó él escapó

(un zorzal habita el ciprés)

se sabe no se sabe que él volvió al rincón de las fotografías y a la escuela con el moño azul con el moño azul y las medias caídas

(un zorzal llena de cantos el ciprés)

se diría que él no rima él rima y él es viento cuando apaga las velas
cuando alumbra
se adormece en un canto en la mano de un niño que pide que no pide
se diría que él es niño que él no es niño
que gesta con el viento cenizas de la lluvia para regar los pies de muchos niños que vuelven de la escuela

(un zorzal canta en la madrugada)

se sabe que él peleó por cada molécula del sur
que intentaron quebrarlo y él escapó él escapó él escapó

en la mano
tenía
un lápiz color zorzal
un moño
azul
blanco y azul

a E.M.
a Liliana Díaz Mindurry

"Él escapó", en Si alguien no escribe un verso, 2002

martes, 6 de abril de 2010

palabras repartidas cuidadosamente, Hugo Gola

Aquí
además
existen hojas
que no han sido taladas.

Aquí
además
existe el agua
que no alcanza a secarse
existe la sangre
disimulada a veces
durante tantos años.

Existe
nuevamente septiembre.

Aquí
todavía vive
la tierra
que vuelve a calentarse
entre mi planta
y la tuya
entre los pies más desnudos
más abajo de los tallos
que quedaron erguidos.

Aquí
puede decirse
hubo labios muy libres
y palabras repartidas cuidadosamente
como armas.

"Poema" (fragmento), PBA, n 22, 1956, en Poesía Buenos Aires, 2010
Foto: Enero, Pintura al óleo, Mayca Alberto