jueves, 1 de julio de 2010

bajo el nombre de clonación, Jaques Derrida

J.D: es muy complicado, por supuesto, hay que empezar a reconocerlo. Ante cierta imaginería, cierta teatralidad de reproducción idéntica y en serie de individuos humanos, entiendo que uno esté espantado, y así me explico las reacciones inmediatas y pasionales de ciertos individuos y responsables políticos del más alto nivel, los llamados "sabios" patentados del Comité de ética, por ejemplo. La "competencia" filosófica, ética, política o jurídica de dichos sabios patentados, su supuesto saber (la sabiduría no es solamente un saber, justamente un saber supuesto, aquí menos que nunca) es el lugar mismo del problema.
Aunque (es una hipótesis, ¿no es cierto?) uno no se planteara ninguna pregunta sobre las competencias científicas o la lucidez supuesta de esos sabios, encaramos aquí zonas de decisión donde la propia idea de competencia, de saber, de sabiduría, por las razones que decía hace un rato, tienen una pertinencia rigurosamente insuficiente, esencialmente inadecuada. Pero, desde el punto de vista de la imaginación, comprendo su terror y también puedo compartirlo. Reflexionando, creo que, de todos modos, hubo, hay y habrá clonación.
Luego, si examinamos de cerca ese concepto de clonación -la reproducción de dos individuos idénticos- eso siempre existió, eso se produce todo el tiempo en la reproducción en general. No es posible controlar o prohibir la reproducción en general; no es posible negar que existe lo idéntico, y que vuelve, y que se multiplica. Lo idéntico vuelve todo el tiempo. En cierto modo, en la familia, en la lengua, en la nación, en la cultura y en la enseñanza, en la tradición, uno trata de reproducir alegando coartadas. Sin reproducción identificante no habría tampoco cultura.
(...) Las grandes deciciones todavía están por venir. ¿Quién hace qué y con qué?
Desde el punto de vista legislativo, hay que encarar con prudencia, caso por caso, sector por sector, los problemas ligados a tal o cual posibilidad. ¿Quién hace qué con ese poder considerable?
No estoy en contra de la clonación en general, pero si se anuncia una amenaza de reproducción de seres humanos, quiero decir como una amenaza efectiva (...) Tomemos por ejemplo el caso del adiestramiento. Se trata de "reproducir" individuos que piensan lo mismo, que se conducen de la misma manera respecto del jefe y en la horda, según esquemas muy bien conocidos. Aquí también se trata de clonación. Sin hablar de todas las técnicas, de todas las prótesis, de todos los injertos...

Jacques Derrida/Elizabeth Roudinesco, Y mañana qué..., 2005

1 comentario:

  1. Derrida plantea un tema que despierta las más dispares conjeturas. Sin embargo, al leer su opinión tan apropiada, también es posible recordar el texto de una lejana advertencia de Aldous Huxley. Cabría preguntarse ahora, si estamos más o menos cerca de aquella novela que irónicamente tituló: "Un mundo feliz".
    Un gran saludo. David Antonio Sorbille

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